Revólver del microscopio

El revólver  o portaobjetivos en un microscopio te brinda la posibilidad de cambiar de objetivo de manera fácil y rápida sin tener que estar desmontando nada.

Por lo general, los microscopios montan entre dos y cuatro objetivos en un revólver, por lo que podrás seleccionar tantos aumentos distintos como objetivos tengas montados él.

En los equipos de microscopios que no disponen de revólver, los objetivos se tienen que intercambiar desenroscando el objetivo del microscopio.

También existen microscopios que no permiten el cambio de objetivos, pero son los menos profesionales.

¿Cómo funciona?

El funcionamiento de un revólver en el microscopio es muy sencillo, ya que básicamente es una rueda dotada de objetivos y mediante ella se seleccionan los distintos aumentos.

Un portaobjetivo tiene entre dos y cuatro agujeros preparados para alojar un objetivo en cada uno de ellos, preferiblemente de distinto aumento, si no, no sería muy funcional.

Para seleccionar el objetivo adecuado sólo se debe girar el revólver como si de una ruleta se tratase, dejando el objetivo seleccionado en una posición centrada con la platina.

Su nombre le viene por la semejanza que tiene con el tambor de un revólver, utilizado para seleccionar la bala que se va a disparar. 

Por lo cual, la función de esta pieza es facilitar la selección de aumento que se desea utilizar.

Revólver microscopio
Revólver de un microscopio de tipo intercambiable

Tipos de revólver para microscopios

En total son dos los tipos de revólveres que existen para los microscopios ópticos, divididos entre revólver de objetivo fijo y de tipo intercambiable.

Los revólveres de tipo fijo vienen unidos en una sola pieza junto con los objetivos, por los que éstos no se pueden cambiar por otros de distinto aumento.

Estos tipos de portaobjetivos son más habituales en microscopios baratos o básicos utilizados para la enseñanza o principiantes.

Los microscopios dotados de un revólver fijo sólo da la posibilidad de seleccionar los objetivos que ya vienen instalados, y no da la posibilidad de intercambiar los objetivos.

Por otro lado, en los de tipo intercambiables, al ser más avanzados sí permiten cambiar los objetivos en el revólver mediante su sistema de rosca.

En estos casos podrás instalar los objetivos que desees, ya sean de inmersión, secos o de la cantidad de aumento que necesites.

Los microscopios no llevaban revólver

En los primeros microscopios no existía ninguna pieza que intercambiase los objetivos, y el cambio de aumento se hacía moviendo el con junto de lentes utilizadas.

No fue hasta 1776 cuando Jeremiah Sisson fabricó el primer revólver para microscopios de la historia.

Desde entonces, los microscopios comenzaron a fabricarse con portaobjetivos de tipo intercambiables, aportando facilidad a la selección de aumentos.

¿Te han quedado dudas sobre esta importante parte del microscopio óptico compuesto?